SANTO ENTIERRO O URNA DE ZAMORA

Títular de

REAL COFRADÍA DEL SANTO ENTIERRO

Un Cristo Yacente

Este paso es conocido popularmente como La Urna. La figura del Yacente que descansa dentro de la urna está realizado por Luis Álvarez Duarte en 2002.

Antiguamente, el Cristo lo realizó Aurelio de la Iglesia Blanco, éste desfiló por primera vez en 1898. Hubo demasiados problemas con las autoridades eclesiásticas por ser demasiado realista y tuvo que ser retocado. La obra que nos ha llegado, nada tiene que ver con la que realizó Aurelio de la Iglesia, ya que ésta sufrió dos transformaciones salvajes que alteraron la fisonomía de la imagen.




Aurelio de la Iglesia se inspiró en un cadáver del Hospital San Carlos de Madrid. Se cuenta que el cadáver era de un muchacho ahogado en el río Manzanares.
El realismo de la figura supuso que las autoridades eclesiásticas se negaran a su bendición hasta que no fueran suprimidos algunos detalles.


Las reformas:
--La primera de ellas fue realizada por el escultor Florentino Trapero en 1956, quien, retalla el abultado pecho del Cristo, suprime los pelos de las axilas y policromándola de nuevo, con una encarnadura mate al aceite que presenta un tono uniforme, sin apenas veladuras y que nada tenía que ver con la original imagen. Fue tal la forma, que la Cofradía opinó que parecía que se había hecho de nuevo.

--La segunda fue realizada por Julio Mostajo, que cambió el antiguo sudario de tela encolada por uno nuevo, más rígido, al que sujetó la imagen. Este Yacente se encuentra en el Museo de Semana Santa junto con otro articulado que salía en el s. XVI y que ahora se emplea en el Sermón del Descendimiento.
 

La gran Urna, de madera tallada, que da nombre al paso es obra de Justo Fernández del año 1892.

 Está realizada en madera de nogal con gusto neogótico y sin policromar, lo cual sirvió de modelo para la realización de las mesas posteriores, como la suya propia que sigue el mismo estilo neogótico.


La imagen recibe culto en la actualidad en la Capilla de Santa Ines, justo bajo la torre románica de la Catedral de Zamora.

Para la procesión del Santo Entierro al Cristo en su Urna le trasladan desde la Catedral hasta San Esteban