sábado, 24 de marzo de 2012
NUESTRA SEÑORA DEL BUEN FIN Y NAZARET CÁCERES
NUESTRA SEÑORA DEL BUEN FIN Y NAZARET
Propiedad de
Excma. e Ilustre Cofradía Hemandad Penitencial del Stmo. Cristo de las Batallas y María Stma. de los Dolores
Imagen realizada por el escultor sevillano Francisco Berlanga de Ávila.
Partiendo de una mascarilla antigua de la Virgen de los Dolores del siglo XVII imagen de vestir que procesiona el Sábado Santo, vestida de hebrea y colocada ante la cruz vacía con sudario, sobre el Monte Calvario, realizado con claveles rojos.
es una representación iconográfica de la Soledad de María al pie de la Cruz (Stábat Mater Dolorosa).
En el año 1998 era restaurada por mencionado artista puesto que se habían producido daños el cuello y cabeza de la imagen ocasionados por los cambios bruscos de temperatura y a las goteras existentes en la Capilla de San Miguel, en la S.I.Concatedral de Santa María, dónde se mantenía expuesta al culto.
A partir de entonces, se guarda en el Convento de las Religiosas Jerónimas, sito en la calle Olmo de esta ciudad.
Es procesionada sobre unas andas, donación de una familia de hermanos de la Cofradía en el año 1987, andas sobre las que procesionó María Santísima de los Dolores hasta el año 1997 que estrenó las suyas propias y quedaron definitivamente las anteriores para la Virgen del Buen Fin.
En la delantera de las mismas encontramos los motivos del corazón atravesado por los siete puñales, orlado todo ello por la corona de espinas. Este motivo está realizado en bronce.
Procesiona el Sábado Santo
PASOS DEL SANTO CRISTO DE LA BIENAVENTURANZA DE LEÓN
Imagen propiedad de
COFRADÍA DEL SANTO CRISTO DE LA BIENAVENTURA
La imagen es una virgen dolorosa de candelero o de vestir, realizada por José Luis Casanova García en el año 2000.
En principio estaban tallados cabeza y manos, en el año 2007 y debido a la devoción que la imagen ha provocado entre los fieles de la Parroquia que besaban las sandalias que inicialmente completaban la imagen de la virgen se decide incorporar la talla de los pies, desnudos, a fin de acercar los vínculos de la Cofradía con la Parroquia y aumentar la devoción de los feligreses a la imagen.
Está realizada en madera de cedro policromada al oleo al estilo tradicional, ojos de cristal y pestañas.
Tres lagrimas recorren el dulce rostro de la virgen que sigue las líneas castellanas de este tipo de imágenes, representado a una mujer dulce lejos de la juventud típica de otras zonas geográficas.
En su representación lleva una de las manos sobre el pecho en señal de duelo y la otra mano semi-flexionada y con el dedo índice extendido señalando al frente el camino de la bienaventuranza, clave y guía la Cofradía.
Desde su adquisición, y gracias a la vinculación con la Iglesia de San Claudio, se encuentra al culto en el lateral izquierdo de la misma, junto a la Imagen titular de la Cofradía.
La imagen realizada para procesionar en la mañana de Jueves Santo, procesionó bajo palio desde el principio, si bien los primeros años su vestimenta era “de hebrea”, y las bambalinas lisas negras con flecos dorados y el emblema de la Cofradía en la parte delantera y la trasera.
Se adquirieron dos mantos azul y morado y un vestido color mostaza, los cuales se utilizan actualmente para acompañar a la imagen durante el año en la Iglesia.
El trono de madera de pino fue realizado por los talleres municipales, siendo costeados los materiales por la Cofradía.
las bambalinas y el techo del palio, en colores negro y oro se cambiaron por color azul identificativo de nuestra Cofradía y bordar primero la delantera del palio y posteriormente la trasera, realizados en fases en varios años.
El vestido también sufrió modificaciones y cambios, pudiendo adquirir en el año 2005 un vestido bordado en oro, si bien en un principio se opto por el color negro para el mismo, posteriormente se decidió cambiar el mismo por el color blanco, más acorde al sentido de la Cofradía, símbolo de Bienaventuranza y esperanza en Cristo.
El manto inicial corto se sustituyo por uno largo y tras muchas vicisitudes y problemas consiguió procesionar bordado en el año 2008, incorporando en el centro del mismo los simbolos de nuestra cofradía, la cruz y las lámparas
Finalmente en el año 2010 y gracias a la donación de un hermano de la Cofradía se adquirió en los talleres de Orovio de la Torre en Ciudad Real, un trono de plata repujada, diferente a los tronos brillantes y llamativos que actualmente se procesionan en la mayoría de ciudades, llevando un tratamiento de patinado que trasmite sobriedad.
Incorpora en la parte delantera en símbolo de Mater Dolorosa Virgen y Reina y en la parte trasera la corona y los clavos de Nuestro Señor Jesucristo. También este año y gracias a la aportación de las braceras se adquirió una diadema en plata para la virgen con ornamentos de pedrería azul. Desde el primer año procesiona también con un rosario en la mano que lleva extendida y un pañuelo en la mano que lleva sobre el pecho. Es portada a hombros por 90 braceras
COFRADÍA DEL SANTO CRISTO DE LA BIENAVENTURA
Tres lagrimas recorren el dulce rostro de la virgen que sigue las líneas castellanas de este tipo de imágenes, representado a una mujer dulce lejos de la juventud típica de otras zonas geográficas.
En su representación lleva una de las manos sobre el pecho en señal de duelo y la otra mano semi-flexionada y con el dedo índice extendido señalando al frente el camino de la bienaventuranza, clave y guía la Cofradía.
Desde su adquisición, y gracias a la vinculación con la Iglesia de San Claudio, se encuentra al culto en el lateral izquierdo de la misma, junto a la Imagen titular de la Cofradía.
La imagen realizada para procesionar en la mañana de Jueves Santo, procesionó bajo palio desde el principio, si bien los primeros años su vestimenta era “de hebrea”, y las bambalinas lisas negras con flecos dorados y el emblema de la Cofradía en la parte delantera y la trasera.
Se adquirieron dos mantos azul y morado y un vestido color mostaza, los cuales se utilizan actualmente para acompañar a la imagen durante el año en la Iglesia.
El trono de madera de pino fue realizado por los talleres municipales, siendo costeados los materiales por la Cofradía.
las bambalinas y el techo del palio, en colores negro y oro se cambiaron por color azul identificativo de nuestra Cofradía y bordar primero la delantera del palio y posteriormente la trasera, realizados en fases en varios años.
El vestido también sufrió modificaciones y cambios, pudiendo adquirir en el año 2005 un vestido bordado en oro, si bien en un principio se opto por el color negro para el mismo, posteriormente se decidió cambiar el mismo por el color blanco, más acorde al sentido de la Cofradía, símbolo de Bienaventuranza y esperanza en Cristo.
El manto inicial corto se sustituyo por uno largo y tras muchas vicisitudes y problemas consiguió procesionar bordado en el año 2008, incorporando en el centro del mismo los simbolos de nuestra cofradía, la cruz y las lámparas
Finalmente en el año 2010 y gracias a la donación de un hermano de la Cofradía se adquirió en los talleres de Orovio de la Torre en Ciudad Real, un trono de plata repujada, diferente a los tronos brillantes y llamativos que actualmente se procesionan en la mayoría de ciudades, llevando un tratamiento de patinado que trasmite sobriedad.
Incorpora en la parte delantera en símbolo de Mater Dolorosa Virgen y Reina y en la parte trasera la corona y los clavos de Nuestro Señor Jesucristo. También este año y gracias a la aportación de las braceras se adquirió una diadema en plata para la virgen con ornamentos de pedrería azul. Desde el primer año procesiona también con un rosario en la mano que lleva extendida y un pañuelo en la mano que lleva sobre el pecho. Es portada a hombros por 90 braceras
COFRADÍA DEL SANTO CRISTO DE LA BIENAVENTURANZA LEÓN
COFRADÍA DEL SANTO CRISTO DE LA BIENAVENTURA
Cruz latina lisa iluminada por dos lámparas de aceite, una a cada lado.
Todo ello en color oro, a excepción de las llamas que figuran en color rojo, y enmarcado por dos círculos concéntricos.
Fundada en 1992, teniendo desde entonces su sede canónica
IGLESIA PARROQUIAL DE SAN CLAUDIO
Su finalidad es triple:
Promover la vivencia cristiana de las Bienaventuranzas.
Estimular la fraternidad cristiana entre sus miembros.
Expresar el sentido penitencial a través de los desfiles procesionales en torno al misterio de la Muerte y Resurrección del Señor, de acuerdo con las actuales exigencias de la piedad popular y de la nueva evangelización.
Con las bendiciones de D. Antonio Villaplana Molina, obispo de León, nace esta Cofradía el 8 de junio del año 1992, erigida en la parroquia de San Claudio de León, heredera del más antiguo cenobio de la ciudad, surgido sobre las tumbas martiriales de Claudio, Lupercio y Victorico, miembros de la Legión VII Gémina e hijos de San Marcelo, oficial que fue condenado a muerte por declararse cristiano en tiempos del emperador Diocleciano (finales del s. III. d. C.).
Si los elementos identificativos buscan la huella de los antepasados, la vida de esta cofradía camina también indefectiblemente unida a la de la parroquia en la que se asienta, y puede bien considerarse simbólica heredera de aquella otra surgida en la Edad Media y que agrupaba al gremio de monederos del reino, es decir: a los profesionales encargados de acuñar y distribuir moneda en el territorio de León.
No es una herencia cualquiera, sino la ligazón con una de las más antiguas agrupaciones leonesas, crisol del culto y la devoción popular.
La elección del nombre no pudo resultar más oportuna y simbólica. Cristo, en su lección humana, eligió un discreto lugar de Galilea, en Eretz Israel, la Tierra Prometida, para participar la Buena Nueva a los hombres. Bienaventurados los que sigan sus enseñanzas, bienaventurado Cristo que nos mostró el camino de la Fe, la Verdad y la Vida.
Los padres de esta Cofradía sin duda tuvieron en la mente y en el corazón este mensaje.
En 1994 se consiguió el dinero necesario para policromar el Cristo titular de la Cofradía, cuya copia ya se había concebido meses atrás.
Eligieron para procesionar el Jueves Santo, rindiendo tributo y homenaje al Santo Cristo de la parroquia de San Claudio, que, sobre sus hombros, cada Semana Santa a partir de 1993, se ha mostrado a la devoción de los leoneses. El Sábado de Pasión, siguiendo el camino de la penitencia, los cofrades participan en un Viacrucis.
La primera procesión, en 1993, fue posible gracias a la ayuda de los 350 hermanos pertenecientes a la cofradía en aquel momento, al empuje de su abad, Javier Sánchez, y a las ayudas económicas de los hermanos anónimos que donaron, desde el guión de la Cofradía, hasta ciertas cantidades para instrumentos musicales y otros fines, una piadosa práctica todavía hoy vigente.
Pero también colaboraron en aquella primera muestra de devoción los miembros de la Cofradía de Nuestra Señora de las Angustias y Soledad de León, que, generosamente, cedió dos tronos completos a su joven hermana de San Claudio.
También San Lorenzo contribuyó mediante la entrega temporal de un manto para la Virgen, una Corona, una Cruz Alzada y los Portacirios.
Se procesionaron el Cristo de la Bienaventuranza, de la propia parroquia, que salió sin policromar, la Piedad de Sahagún, y el Paso de la Santa Cruz, realizado para los niños, entre doce y catorce años, y que consiste en una cruz sencilla encima de unas andas.
Desde los primeros años eligen una fecha para expones sus vivencias, y en la cual se celebrara la fiesta de la Cofradía. Esas jornadas fueron los días 24 y 25 de octubre, a las 8 y media de la tarde, momento en el que, después de la misa y la devoción, toman posesión los cargos electos.
Por fin, en 1994 se consiguió el dinero necesario para policromar el Cristo titular de la Cofradía, cuya copia ya se había concebido meses atrás.
Pero si hubo un año que caló hondo en la historia de la hermandad, ese fue 1997.
En 1997, el abad Javier Martínez, en nombre de los suyos, encarga una imagen de la Piedad al escultor salmantino Ricardo Flecha Barrio, que cumple su labor con magistral arte y entrega lo acordado en 1998, bajo el báculo abacial de Francisco Javier Arias.
HÁBITOS
Tunica de tablón de sarga negra, con cintas de raso del mismo color bordeando el cuello y atravesando horizontalmente la parte superior del pecho y de la espalda y verticalmente el centro delantero.
Capillo y bocamangas de raso azul celeste, cíngulo del mismo color con las caídas hacia la izquierda y emblema bordado en oro y fondo azul celeste sobre el corazón.
Camisa blanca y corbata, guantes, pantalón, calcetines y zapato bajo, todo en color negro.
A pesar de su juventud (fundada en 1992) tiene en cuenta como actuan las Cofradías mas antiguas de nuestra Ciudad, y ha cuidado con esmero las tradiciones en los actos mas representativos de la misma siguiendo año a año esas costumbres creadas, algunas desde el primer año de su actividad, y otras que han surgido en el paso de los años.
Los actos procesionales organizados por esta Cofradía son dos:
el Vía Crucis procesional en la noche del Sábado Santo
y la procesión de las Bienaventuranzas en la mañana de Jueves Santo.
Ambos actos tienen un ritual establecido que se ha conservado y potenciado año tras año, como es la bajada de la Cruz para el Via Crucis.
Revistas.
En 1997, el esfuerzo por dar a conocer sus ideas, sus inquietudes, sus esfuerzos y tantas horas de desvelo en común, se ve plasmado en la redacción de una revista de la Cofradía.
http://cofradiascb.es/WP/?page_id=73
Cruz latina lisa iluminada por dos lámparas de aceite, una a cada lado.
Todo ello en color oro, a excepción de las llamas que figuran en color rojo, y enmarcado por dos círculos concéntricos.
Fundada en 1992, teniendo desde entonces su sede canónica
IGLESIA PARROQUIAL DE SAN CLAUDIO
Su finalidad es triple:
Promover la vivencia cristiana de las Bienaventuranzas.
Estimular la fraternidad cristiana entre sus miembros.
Expresar el sentido penitencial a través de los desfiles procesionales en torno al misterio de la Muerte y Resurrección del Señor, de acuerdo con las actuales exigencias de la piedad popular y de la nueva evangelización.
Con las bendiciones de D. Antonio Villaplana Molina, obispo de León, nace esta Cofradía el 8 de junio del año 1992, erigida en la parroquia de San Claudio de León, heredera del más antiguo cenobio de la ciudad, surgido sobre las tumbas martiriales de Claudio, Lupercio y Victorico, miembros de la Legión VII Gémina e hijos de San Marcelo, oficial que fue condenado a muerte por declararse cristiano en tiempos del emperador Diocleciano (finales del s. III. d. C.).
Si los elementos identificativos buscan la huella de los antepasados, la vida de esta cofradía camina también indefectiblemente unida a la de la parroquia en la que se asienta, y puede bien considerarse simbólica heredera de aquella otra surgida en la Edad Media y que agrupaba al gremio de monederos del reino, es decir: a los profesionales encargados de acuñar y distribuir moneda en el territorio de León.
No es una herencia cualquiera, sino la ligazón con una de las más antiguas agrupaciones leonesas, crisol del culto y la devoción popular.
La elección del nombre no pudo resultar más oportuna y simbólica. Cristo, en su lección humana, eligió un discreto lugar de Galilea, en Eretz Israel, la Tierra Prometida, para participar la Buena Nueva a los hombres. Bienaventurados los que sigan sus enseñanzas, bienaventurado Cristo que nos mostró el camino de la Fe, la Verdad y la Vida.
Los padres de esta Cofradía sin duda tuvieron en la mente y en el corazón este mensaje.
En 1994 se consiguió el dinero necesario para policromar el Cristo titular de la Cofradía, cuya copia ya se había concebido meses atrás.
Eligieron para procesionar el Jueves Santo, rindiendo tributo y homenaje al Santo Cristo de la parroquia de San Claudio, que, sobre sus hombros, cada Semana Santa a partir de 1993, se ha mostrado a la devoción de los leoneses. El Sábado de Pasión, siguiendo el camino de la penitencia, los cofrades participan en un Viacrucis.
La primera procesión, en 1993, fue posible gracias a la ayuda de los 350 hermanos pertenecientes a la cofradía en aquel momento, al empuje de su abad, Javier Sánchez, y a las ayudas económicas de los hermanos anónimos que donaron, desde el guión de la Cofradía, hasta ciertas cantidades para instrumentos musicales y otros fines, una piadosa práctica todavía hoy vigente.
Pero también colaboraron en aquella primera muestra de devoción los miembros de la Cofradía de Nuestra Señora de las Angustias y Soledad de León, que, generosamente, cedió dos tronos completos a su joven hermana de San Claudio.
También San Lorenzo contribuyó mediante la entrega temporal de un manto para la Virgen, una Corona, una Cruz Alzada y los Portacirios.
Se procesionaron el Cristo de la Bienaventuranza, de la propia parroquia, que salió sin policromar, la Piedad de Sahagún, y el Paso de la Santa Cruz, realizado para los niños, entre doce y catorce años, y que consiste en una cruz sencilla encima de unas andas.
Desde los primeros años eligen una fecha para expones sus vivencias, y en la cual se celebrara la fiesta de la Cofradía. Esas jornadas fueron los días 24 y 25 de octubre, a las 8 y media de la tarde, momento en el que, después de la misa y la devoción, toman posesión los cargos electos.
Por fin, en 1994 se consiguió el dinero necesario para policromar el Cristo titular de la Cofradía, cuya copia ya se había concebido meses atrás.
Pero si hubo un año que caló hondo en la historia de la hermandad, ese fue 1997.
En 1997, el abad Javier Martínez, en nombre de los suyos, encarga una imagen de la Piedad al escultor salmantino Ricardo Flecha Barrio, que cumple su labor con magistral arte y entrega lo acordado en 1998, bajo el báculo abacial de Francisco Javier Arias.
HÁBITOS
Tunica de tablón de sarga negra, con cintas de raso del mismo color bordeando el cuello y atravesando horizontalmente la parte superior del pecho y de la espalda y verticalmente el centro delantero.
Capillo y bocamangas de raso azul celeste, cíngulo del mismo color con las caídas hacia la izquierda y emblema bordado en oro y fondo azul celeste sobre el corazón.
Camisa blanca y corbata, guantes, pantalón, calcetines y zapato bajo, todo en color negro.
A pesar de su juventud (fundada en 1992) tiene en cuenta como actuan las Cofradías mas antiguas de nuestra Ciudad, y ha cuidado con esmero las tradiciones en los actos mas representativos de la misma siguiendo año a año esas costumbres creadas, algunas desde el primer año de su actividad, y otras que han surgido en el paso de los años.
Los actos procesionales organizados por esta Cofradía son dos:
el Vía Crucis procesional en la noche del Sábado Santo
y la procesión de las Bienaventuranzas en la mañana de Jueves Santo.
Ambos actos tienen un ritual establecido que se ha conservado y potenciado año tras año, como es la bajada de la Cruz para el Via Crucis.
Revistas.
En 1997, el esfuerzo por dar a conocer sus ideas, sus inquietudes, sus esfuerzos y tantas horas de desvelo en común, se ve plasmado en la redacción de una revista de la Cofradía.
http://cofradiascb.es/WP/?page_id=73
PASOS DE STO CRISTO DE LA BIENAVENTURANZA LEÓN
SANTA CRUZ
Paso propiedad de la Cofradía de León “Santo Cristo de la Bienaventuranza”, portado a hombros por treinta jóvenes con edades comprendidas entre los trece y diecisiete años.
Sobre el trono de aluminio va una cruz con sudario y un ángel (atributos), la imagen es obra del escultor zamorano D. Ricardo Flecha Barrio y donada a la Cofradía en el año 1.998.
No se encuentra expuesta al culto
NUESTRO SEÑOR JESÚS NAZARENO
En el año 2000 la Cofradía decide ampliar su numero de pasos incorporando la imagen de un Nazareno y se opta por procesionar una Imagen cedida por la Parroquia de San Pedro de Boñar
En el año 2005 se decide sustituir la imagen por una propiedad de la Cofradía, encargándole su realización a Jose Luis Casanova García con unas condiciones:
-Se utilizará como base para su realización el rostro y los rasgos de la Imagen del Santo Cristo de la Bienaventuranza, imagen titular de la Cofradía,
-representará una caída de Jesus, concretamente la que el Cirineo ayuda a Jesssssús con la Cruz.
Gracias a donaciones se consiguió complementar la imagen del Nazareno con la de Simón de Cirene que se encuentra agachado, ayudando con el peso de la cruz, y de un soldado romano increpando al cirineo .
La Imagen de Nuestro Señor Jesus Nazareno se encuentra al culto en la Iglesia de San Claudio durante el año, manteniendo para su exposición al culto la túnica negra original que cubria la anterior imagen, utilizando para procesionar una túnica morada bordada en oro.
Como característica procesiona con unos gemelos de oro donados por un hermano de la Cofradía.
El trono, en tonos de nogal, se ha ido engrandeciendo con tallas en las partes delantera y trasera, en la delantera con el escudo de la Cofradía y en la trasera con una placa como muestra del hermanamiento de los braceros de ese paso con las braceras de Nuestra Madre de la Piedad.
NUESTRA MADRE DE LA PIEDAD
Paso propiedad de la Cofradía de León “Santo Cristo de la Bienaventuranza”, portado a hombros por treinta jóvenes con edades comprendidas entre los trece y diecisiete años.
Sobre el trono de aluminio va una cruz con sudario y un ángel (atributos), la imagen es obra del escultor zamorano D. Ricardo Flecha Barrio y donada a la Cofradía en el año 1.998.
No se encuentra expuesta al culto
NUESTRO SEÑOR JESÚS NAZARENO
En el año 2000 la Cofradía decide ampliar su numero de pasos incorporando la imagen de un Nazareno y se opta por procesionar una Imagen cedida por la Parroquia de San Pedro de Boñar
En el año 2005 se decide sustituir la imagen por una propiedad de la Cofradía, encargándole su realización a Jose Luis Casanova García con unas condiciones:
-Se utilizará como base para su realización el rostro y los rasgos de la Imagen del Santo Cristo de la Bienaventuranza, imagen titular de la Cofradía,
-representará una caída de Jesus, concretamente la que el Cirineo ayuda a Jesssssús con la Cruz.
Gracias a donaciones se consiguió complementar la imagen del Nazareno con la de Simón de Cirene que se encuentra agachado, ayudando con el peso de la cruz, y de un soldado romano increpando al cirineo .
La Imagen de Nuestro Señor Jesus Nazareno se encuentra al culto en la Iglesia de San Claudio durante el año, manteniendo para su exposición al culto la túnica negra original que cubria la anterior imagen, utilizando para procesionar una túnica morada bordada en oro.
Como característica procesiona con unos gemelos de oro donados por un hermano de la Cofradía.
El trono, en tonos de nogal, se ha ido engrandeciendo con tallas en las partes delantera y trasera, en la delantera con el escudo de la Cofradía y en la trasera con una placa como muestra del hermanamiento de los braceros de ese paso con las braceras de Nuestra Madre de la Piedad.
NUESTRA MADRE DE LA PIEDAD
COFRADÍA DEL SANTO CRISTO DE LA BIENAVENTURA LEÓN
COFRADÍA DEL SANTO CRISTO DE LA BIENAVENTURA
Cruz latina lisa iluminada por dos lámparas de aceite, una a cada lado.
Todo ello en color oro, a excepción de las llamas que figuran en color rojo, y enmarcado por dos círculos concéntricos.
Fundada en 1992, teniendo desde entonces su sede canónica
IGLESIA PARROQUIAL DE SAN CLAUDIO
Su finalidad es triple:
Promover la vivencia cristiana de las Bienaventuranzas.
Estimular la fraternidad cristiana entre sus miembros.
Expresar el sentido penitencial a través de los desfiles procesionales en torno al misterio de la Muerte y Resurrección del Señor, de acuerdo con las actuales exigencias de la piedad popular y de la nueva evangelización.
Con las bendiciones de D. Antonio Villaplana Molina, obispo de León, nace esta Cofradía el 8 de junio del año 1992, erigida en la parroquia de San Claudio de León, heredera del más antiguo cenobio de la ciudad, surgido sobre las tumbas martiriales de Claudio, Lupercio y Victorico, miembros de la Legión VII Gémina e hijos de San Marcelo, oficial que fue condenado a muerte por declararse cristiano en tiempos del emperador Diocleciano (finales del s. III. d. C.).
Si los elementos identificativos buscan la huella de los antepasados, la vida de esta cofradía camina también indefectiblemente unida a la de la parroquia en la que se asienta, y puede bien considerarse simbólica heredera de aquella otra surgida en la Edad Media y que agrupaba al gremio de monederos del reino, es decir: a los profesionales encargados de acuñar y distribuir moneda en el territorio de León.
No es una herencia cualquiera, sino la ligazón con una de las más antiguas agrupaciones leonesas, crisol del culto y la devoción popular.
La elección del nombre no pudo resultar más oportuna y simbólica. Cristo, en su lección humana, eligió un discreto lugar de Galilea, en Eretz Israel, la Tierra Prometida, para participar la Buena Nueva a los hombres. Bienaventurados los que sigan sus enseñanzas, bienaventurado Cristo que nos mostró el camino de la Fe, la Verdad y la Vida.
Los padres de esta Cofradía sin duda tuvieron en la mente y en el corazón este mensaje.
En 1994 se consiguió el dinero necesario para policromar el Cristo titular de la Cofradía, cuya copia ya se había concebido meses atrás.
Eligieron para procesionar el Jueves Santo, rindiendo tributo y homenaje al Santo Cristo de la parroquia de San Claudio, que, sobre sus hombros, cada Semana Santa a partir de 1993, se ha mostrado a la devoción de los leoneses. El Sábado de Pasión, siguiendo el camino de la penitencia, los cofrades participan en un Viacrucis.
La primera procesión, en 1993, fue posible gracias a la ayuda de los 350 hermanos pertenecientes a la cofradía en aquel momento, al empuje de su abad, Javier Sánchez, y a las ayudas económicas de los hermanos anónimos que donaron, desde el guión de la Cofradía, hasta ciertas cantidades para instrumentos musicales y otros fines, una piadosa práctica todavía hoy vigente.
Pero también colaboraron en aquella primera muestra de devoción los miembros de la Cofradía de Nuestra Señora de las Angustias y Soledad de León, que, generosamente, cedió dos tronos completos a su joven hermana de San Claudio.
También San Lorenzo contribuyó mediante la entrega temporal de un manto para la Virgen, una Corona, una Cruz Alzada y los Portacirios.
Se procesionaron el Cristo de la Bienaventuranza, de la propia parroquia, que salió sin policromar, la Piedad de Sahagún, y el Paso de la Santa Cruz, realizado para los niños, entre doce y catorce años, y que consiste en una cruz sencilla encima de unas andas.
Desde los primeros años eligen una fecha para expones sus vivencias, y en la cual se celebrara la fiesta de la Cofradía. Esas jornadas fueron los días 24 y 25 de octubre, a las 8 y media de la tarde, momento en el que, después de la misa y la devoción, toman posesión los cargos electos.
Por fin, en 1994 se consiguió el dinero necesario para policromar el Cristo titular de la Cofradía, cuya copia ya se había concebido meses atrás.
Pero si hubo un año que caló hondo en la historia de la hermandad, ese fue 1997.
En 1997, el abad Javier Martínez, en nombre de los suyos, encarga una imagen de la Piedad al escultor salmantino Ricardo Flecha Barrio, que cumple su labor con magistral arte y entrega lo acordado en 1998, bajo el báculo abacial de Francisco Javier Arias.
HÁBITOS
Tunica de tablón de sarga negra, con cintas de raso del mismo color bordeando el cuello y atravesando horizontalmente la parte superior del pecho y de la espalda y verticalmente el centro delantero.
Capillo y bocamangas de raso azul celeste, cíngulo del mismo color con las caídas hacia la izquierda y emblema bordado en oro y fondo azul celeste sobre el corazón.
Camisa blanca y corbata, guantes, pantalón, calcetines y zapato bajo, todo en color negro.
A pesar de su juventud (fundada en 1992) tiene en cuenta como actuan las Cofradías mas antiguas de nuestra Ciudad, y ha cuidado con esmero las tradiciones en los actos mas representativos de la misma siguiendo año a año esas costumbres creadas, algunas desde el primer año de su actividad, y otras que han surgido en el paso de los años.
Los actos procesionales organizados por esta Cofradía son dos:
el Vía Crucis procesional en la noche del Sábado Santo
y la procesión de las Bienaventuranzas en la mañana de Jueves Santo.
Ambos actos tienen un ritual establecido que se ha conservado y potenciado año tras año, como es la bajada de la Cruz para el Via Crucis.
Revistas.
En 1997, el esfuerzo por dar a conocer sus ideas, sus inquietudes, sus esfuerzos y tantas horas de desvelo en común, se ve plasmado en la redacción de una revista de la Cofradía.
http://cofradiascb.es/WP/?page_id=73
Cruz latina lisa iluminada por dos lámparas de aceite, una a cada lado.
Todo ello en color oro, a excepción de las llamas que figuran en color rojo, y enmarcado por dos círculos concéntricos.
Fundada en 1992, teniendo desde entonces su sede canónica
IGLESIA PARROQUIAL DE SAN CLAUDIO
Su finalidad es triple:
Promover la vivencia cristiana de las Bienaventuranzas.
Estimular la fraternidad cristiana entre sus miembros.
Expresar el sentido penitencial a través de los desfiles procesionales en torno al misterio de la Muerte y Resurrección del Señor, de acuerdo con las actuales exigencias de la piedad popular y de la nueva evangelización.
Con las bendiciones de D. Antonio Villaplana Molina, obispo de León, nace esta Cofradía el 8 de junio del año 1992, erigida en la parroquia de San Claudio de León, heredera del más antiguo cenobio de la ciudad, surgido sobre las tumbas martiriales de Claudio, Lupercio y Victorico, miembros de la Legión VII Gémina e hijos de San Marcelo, oficial que fue condenado a muerte por declararse cristiano en tiempos del emperador Diocleciano (finales del s. III. d. C.).
Si los elementos identificativos buscan la huella de los antepasados, la vida de esta cofradía camina también indefectiblemente unida a la de la parroquia en la que se asienta, y puede bien considerarse simbólica heredera de aquella otra surgida en la Edad Media y que agrupaba al gremio de monederos del reino, es decir: a los profesionales encargados de acuñar y distribuir moneda en el territorio de León.
No es una herencia cualquiera, sino la ligazón con una de las más antiguas agrupaciones leonesas, crisol del culto y la devoción popular.
La elección del nombre no pudo resultar más oportuna y simbólica. Cristo, en su lección humana, eligió un discreto lugar de Galilea, en Eretz Israel, la Tierra Prometida, para participar la Buena Nueva a los hombres. Bienaventurados los que sigan sus enseñanzas, bienaventurado Cristo que nos mostró el camino de la Fe, la Verdad y la Vida.
Los padres de esta Cofradía sin duda tuvieron en la mente y en el corazón este mensaje.
En 1994 se consiguió el dinero necesario para policromar el Cristo titular de la Cofradía, cuya copia ya se había concebido meses atrás.
Eligieron para procesionar el Jueves Santo, rindiendo tributo y homenaje al Santo Cristo de la parroquia de San Claudio, que, sobre sus hombros, cada Semana Santa a partir de 1993, se ha mostrado a la devoción de los leoneses. El Sábado de Pasión, siguiendo el camino de la penitencia, los cofrades participan en un Viacrucis.
La primera procesión, en 1993, fue posible gracias a la ayuda de los 350 hermanos pertenecientes a la cofradía en aquel momento, al empuje de su abad, Javier Sánchez, y a las ayudas económicas de los hermanos anónimos que donaron, desde el guión de la Cofradía, hasta ciertas cantidades para instrumentos musicales y otros fines, una piadosa práctica todavía hoy vigente.
Pero también colaboraron en aquella primera muestra de devoción los miembros de la Cofradía de Nuestra Señora de las Angustias y Soledad de León, que, generosamente, cedió dos tronos completos a su joven hermana de San Claudio.
También San Lorenzo contribuyó mediante la entrega temporal de un manto para la Virgen, una Corona, una Cruz Alzada y los Portacirios.
Se procesionaron el Cristo de la Bienaventuranza, de la propia parroquia, que salió sin policromar, la Piedad de Sahagún, y el Paso de la Santa Cruz, realizado para los niños, entre doce y catorce años, y que consiste en una cruz sencilla encima de unas andas.
Desde los primeros años eligen una fecha para expones sus vivencias, y en la cual se celebrara la fiesta de la Cofradía. Esas jornadas fueron los días 24 y 25 de octubre, a las 8 y media de la tarde, momento en el que, después de la misa y la devoción, toman posesión los cargos electos.
Por fin, en 1994 se consiguió el dinero necesario para policromar el Cristo titular de la Cofradía, cuya copia ya se había concebido meses atrás.
Pero si hubo un año que caló hondo en la historia de la hermandad, ese fue 1997.
En 1997, el abad Javier Martínez, en nombre de los suyos, encarga una imagen de la Piedad al escultor salmantino Ricardo Flecha Barrio, que cumple su labor con magistral arte y entrega lo acordado en 1998, bajo el báculo abacial de Francisco Javier Arias.
HÁBITOS
Tunica de tablón de sarga negra, con cintas de raso del mismo color bordeando el cuello y atravesando horizontalmente la parte superior del pecho y de la espalda y verticalmente el centro delantero.
Capillo y bocamangas de raso azul celeste, cíngulo del mismo color con las caídas hacia la izquierda y emblema bordado en oro y fondo azul celeste sobre el corazón.
Camisa blanca y corbata, guantes, pantalón, calcetines y zapato bajo, todo en color negro.
A pesar de su juventud (fundada en 1992) tiene en cuenta como actuan las Cofradías mas antiguas de nuestra Ciudad, y ha cuidado con esmero las tradiciones en los actos mas representativos de la misma siguiendo año a año esas costumbres creadas, algunas desde el primer año de su actividad, y otras que han surgido en el paso de los años.
Los actos procesionales organizados por esta Cofradía son dos:
el Vía Crucis procesional en la noche del Sábado Santo
y la procesión de las Bienaventuranzas en la mañana de Jueves Santo.
Ambos actos tienen un ritual establecido que se ha conservado y potenciado año tras año, como es la bajada de la Cruz para el Via Crucis.
Revistas.
En 1997, el esfuerzo por dar a conocer sus ideas, sus inquietudes, sus esfuerzos y tantas horas de desvelo en común, se ve plasmado en la redacción de una revista de la Cofradía.
http://cofradiascb.es/WP/?page_id=73
viernes, 23 de marzo de 2012
CONVENTO DE SANTO DOMINGO DE CÁCERES
SEDE DE LA COFRADÍA DE LOS ESTUDIANTES
Fue construída durante el siglo XVI y pertenece a la Orden mendicante de los Franciscanos.
Posee una portada de medio punto sobre la que se eleva una imagen de la Virgen de la Inmaculada.
Convento extramuros, fundado por Catalina de Saavedra y perteneciente al gótico tardío (XVI-XVII), que en su origen fue de la Orden de Predicadores y tras su expulsión pasa a ser de la Orden Franciscana.
Su retablo mayor que data de mediados del siglo XVII está presidido por una imagen de Santo Domingo llevada a cabo en el siglo XVIII,viste el hábito de su orden: túnica y muceta blancos y manto con capuchón negro, con el libro de la Regla en la mano izquierda.
Dicha talla es debida seguramente a la gubia de Luis Salvador de Carmona, con cuya calidad técnica y bello realismo coincide.
Sobre esta imagen y ocupando el tímpano de la hornacina, una gran estrella de ocho puntas, atributo personal de Santo Domingo.
A los lados, cuatro óleos sobre lienzo: los del lado del Evangelio se datan en la fecha del retablo y representan a San Francisco recibiendo los estigmas y San Alvaro de Córdoba; los del lado de la Epístola corresponden al año 1750 y representan la Estigmación de Santa Catalina y San Gonzalo de Amarante.
En el segundo cuerpo observamos tres pinturas sobre lienzo, separadas por cuatro columnas salomónicas más pequeñas que las del primer cuerpo y Santo Dominicio. Aparece un Calvario en remate del retablo, del siglo XVIII, con crucificado del XVI. El retablo es de un cromatismo peculiar, un rojizo propio de la madera sólo con algunos elementos dorados.
La iglesia, es uno de los templos mas grandes de nuestra ciudad.
De una sola nave y cubiertas con diversos tipos de bobéelas de crucería ; entre los contrafuertes , se abren las distintas capillas a su vez comunicadas entre si.
Se encuentran tambien otros retablos barrocos menores de gran belleza como el del San Antonio de Padua, el de San Francisco o el de la Virgen del Rosario, que dicho sea es coopatrona de nuestra ciudad.
Esta Iglesia, es sede de dos Cofradías:
- la del Santísimo Cristo del Calvario mas conocida como la de los Estudiantes,
- la del Santísimo Cristo de la Salud.
De las dependencias conventuales ha de destacarse el claustro, recientemente remodelado, el cual posee una elegante forja que acompaña al pozo y algunos frisos de azulejos de Talavera. Actualmente también esta instalado en este recinto, el Centro Ágora Francesco, donde se imparten los cursos de la Escuela Diocesana de Formación Cofrade.
Fue construída durante el siglo XVI y pertenece a la Orden mendicante de los Franciscanos.
Posee una portada de medio punto sobre la que se eleva una imagen de la Virgen de la Inmaculada.
Convento extramuros, fundado por Catalina de Saavedra y perteneciente al gótico tardío (XVI-XVII), que en su origen fue de la Orden de Predicadores y tras su expulsión pasa a ser de la Orden Franciscana.
Su retablo mayor que data de mediados del siglo XVII está presidido por una imagen de Santo Domingo llevada a cabo en el siglo XVIII,viste el hábito de su orden: túnica y muceta blancos y manto con capuchón negro, con el libro de la Regla en la mano izquierda.
Dicha talla es debida seguramente a la gubia de Luis Salvador de Carmona, con cuya calidad técnica y bello realismo coincide.
Sobre esta imagen y ocupando el tímpano de la hornacina, una gran estrella de ocho puntas, atributo personal de Santo Domingo.
A los lados, cuatro óleos sobre lienzo: los del lado del Evangelio se datan en la fecha del retablo y representan a San Francisco recibiendo los estigmas y San Alvaro de Córdoba; los del lado de la Epístola corresponden al año 1750 y representan la Estigmación de Santa Catalina y San Gonzalo de Amarante.
En el segundo cuerpo observamos tres pinturas sobre lienzo, separadas por cuatro columnas salomónicas más pequeñas que las del primer cuerpo y Santo Dominicio. Aparece un Calvario en remate del retablo, del siglo XVIII, con crucificado del XVI. El retablo es de un cromatismo peculiar, un rojizo propio de la madera sólo con algunos elementos dorados.
La iglesia, es uno de los templos mas grandes de nuestra ciudad.
De una sola nave y cubiertas con diversos tipos de bobéelas de crucería ; entre los contrafuertes , se abren las distintas capillas a su vez comunicadas entre si.
Se encuentran tambien otros retablos barrocos menores de gran belleza como el del San Antonio de Padua, el de San Francisco o el de la Virgen del Rosario, que dicho sea es coopatrona de nuestra ciudad.
Esta Iglesia, es sede de dos Cofradías:
- la del Santísimo Cristo del Calvario mas conocida como la de los Estudiantes,
- la del Santísimo Cristo de la Salud.
De las dependencias conventuales ha de destacarse el claustro, recientemente remodelado, el cual posee una elegante forja que acompaña al pozo y algunos frisos de azulejos de Talavera. Actualmente también esta instalado en este recinto, el Centro Ágora Francesco, donde se imparten los cursos de la Escuela Diocesana de Formación Cofrade.
COFRADÍA DE LOS ESTUDIANTES DE CÁCERES
FRANCISCANA COFRADÍA DEL VIA CRUCIS Y DEL SANTÍSIMO CRISTO DEL CALVARIO
Conocida como la Cofradía de "Los estudiantes"
r los PP. Franciscanos, que había sido donado a la Orden por la familia cacereña de los Camarena, conservándose una réplica del misunainca propiedad de dicha famil
Nace en el año 1958 en el seno del Colegio San Antonio de Padua de Cáceres, regido por los Padres Franciscanos.
La iniciativa partió del ilustre cacereño D. Juan Pablos Abril con el apoyo de un grupo de alumnos del colegio y algunos ex –alumnos, ya universitarios que, comandados por Fray Jerónimo Bonilla, fueron los fundadores de la Cofradía.
Pero el verdadero impulsor, quien más ilusión derrochó, el alma y motor de la misma fue un profesor del colegio: D. Jesús Asunción.
Tanto es así, que pidió que en el momento de su muerte fuese amortajado con el hábito de la Hermandad.
Este mencionado grupo de entusiastas decidió sacar procesionalmente un Crucificado que tenían en la Iglesia Conventual de Santo Domingo, también regida por los PP. Franciscanos, que había sido donado a la Orden por la familia cacereña de los Camarena, conservándose una réplica del mismo en una finca propiedad de dicha familia.
Este Crucificado era el Santísimo Cristo del Calvario, dando así nombre a la Cofradía: “Cofradía del Vía – Crucis y del Santísimo Cristo del Calvario”. Al entrar dentro de su denominación VÍA-CRUCIS es porque dentro de su estación de penitencia se hacía el ejercicio del mismo, costumbre ésta desaparecida.
Pero desde sus comienzos la Hermandad es conocida en todos los ambientes como Cofradía de los Estudiantes, habida cuenta de sus orígenes y que el vivero continuo de sus cofrades sigue siendo el colegio de la orden Franciscana.
El Stmo. Cristo del Calvario procesionó los primeros años en posición vertical, haciéndolo en la mañana del Jueves Santo.
Las primeras andas sobre las que procesionó fueron cedidas por otra Cofradía cacereña, la de los Ramos.
Más adelante, y con la ayuda de D. Germán de Manuel Rubio, director del Taller Escuela Sindical “Virgen de Guadalupe” de Cáceres, se construyeron unas andas propiedad de la Cofradía.
Destacar que la intención de los cofrades era que el Santísimo Cristo procesionase inclinado hacia delante, en una posición similar a la que tiene el famoso Cristo de Salvador Dalí, pero por cuestiones técnicas abandonaron la idea y lo colocaron en posición de descendimiento, la cual viene conservando desde entonces.
Al comienzo de los años setenta la Semana Santa cacereña experimentó un declive, que afectó a todas las Hermandades y a sus Desfiles Procesionales, del que no se libró la Cofradía de los Estudiantes, que incluso llegó a no procesionar algún año.
Fue en el año 1975 cuando otro grupo de estudiantes, igualmente alumnos y ex –alumnos del Colegio San Antonio, capitaneados por el ya universitario Antonio de Manuel Carrasco, y dirigidos por el padre Fray Sebastián García, vuelven a darle impulso a la Cofradía, siendo elegido el primero nuevo Mayordomo de la Cofradía, cargo que en la actualidad sigue ostentando.
La Cofradía se rige por Estatutos que, adaptados al Estatuto Marco de Hermandades y Cofradías de la Diócesis de Coria – Cáceres, fueron aprobados por la autoridad eclesiástica el 22 de Octubre de 2001.
Está adscrita, desde sus orígenes, al Templo Conventual de Nuestra Señora del Rosario de Santo Domingo y en la actualidad cuenta con seiscientos cincuenta hermanos, de los cuales cien hermanos (en dos turnos de cincuenta miembros) son los que portan la sagrada imagen en la mañana del Viernes Santo.
Dentro de su ya tradicional recorrido, son puntos de especial interés: al paso por la calle Moret, la ofrenda ante la Virgen de la Esperanza (Iglesia de San Juan), el paso ante la Torre de Bujaco, calle General Ezponda y la recogida en Santo Domingo.
IMAGEN TITULAR SANTÍSIMO CRISTO DEL CALVARIO
SU SEDE CANÍNICA CONVENTO SANTO DOMINGO
NAZARENOS
Hermanos de escolta:
Túnica negra sujeta a la cintura con cordón franciscano, capa blanca con la cruz del Santo Sepulcro en fieltro rojo en el hombro derecho, capirote blanco, guantes blancos, zapatos y calcetines negros. Medalla de la Cruz del Santo Sepulcro en esmalte rojo.
Hermanos de carga:
Cambian la capa por capelina de color blanco
Estación de penitencia
Y que organiza una de las procesionan que recorren la ciudad el Viernes Santo, la
Procesión de los Estudiantes .po
SANTÍSIMO CRISTO DEL CALVARIO A SU CAPILLA
MÁS COSAS
CONCATEDRAL DE SANTA MARÍA DE CÁCERES
La Excma. e Ilustre Cofradía Hemandad Penitencial del Stmo. Cristo de las Batallas y María Stma. de los Dolores
Tiene su Sede Canónica en
IGLESIA CONCATEDRAL DE SANTA MARÍA
Es el más importante templo cristiano de la ciudad de Cáceres.
Se completa entre los siglos XV y XVI sobre una construcción del siglo XIII de maneras mudéjares y techo de madera.
Realizada completamente con sillares de granito, su estilo se puede considerar románico de transición al gótico.
La Iglesia de Santa María la Mayor, fué elevada al rango de Concatedral por Bula de Su Santidad el Papa Pio XII, fechada el día 9 de abril de 1957, estando situada la Catedral de la Diócesis en Coria.
Es la más importante de las cuatro primitivas parroquias cacereñas.
Este Edificio es Monumento Nacional desde el año 1931.
Tiene dos portadas góticas.
La portada principal, en los pies, en la que destaca el escudo de Orellana y los canecillos románicos de la cornisa
La del Evangelio, frente al Palacio Episcopal, con finas arquivoltas y una imagen moderna de la Virgen en el tímpano.
La iglesia tiene una sola torre, renacentista de tres cuerpos y planta rectangular, coronada por tres flameros donde ahora asientan nidos de cigüeñas; fue realizada entre 1554 y 1559 por Pedro de Ibarra.
En la esquina oeste de esta torre, se halla adosada una estatua de San Pedro de Alcántara ejecutada en 1954 por el escultor extremeño Enrique Pérez Comendador.
El templo, de amplias dimensiones y gruesos muros, continuando con la costumbre defensiva de la ciudad, se distribuye en tres naves con seis tramos cada una, separados por arcos apuntados sobre pilares cruciformes.
Con casi idéntica altura, las bóvedas son de crucería gótica; sus claves y entrecruzamientos lucen todo un catálogo de escudos y símbolos heráldicos de las principales familias de la nobleza cacereña.
En la tribuna a los pies de la nave central se encuentra un órgano de 1703 fabricado por Manuel de la Viña (Manuel de la Viña me fezit, anno de 1703), que fue reformado en 1973 por la empresa Orgamusik. Este instrumento en la actualidad cuenta con 27 registros sonantes en dos teclados y pedal.
En el interior merecen especial atención la puerta de la sacristía, realizada por Alonso de Torralba en el año1525, ejemplo del plateresco extremeño;
la Pila de Agua Bendita, realizada en mármol en el siglo XIV;
numerosas lápidas, tumbas y sarcófagos; así como una rica colección de objetos litúrgicos de los siglos XV al XIX.
Tiene su Sede Canónica en
IGLESIA CONCATEDRAL DE SANTA MARÍA
Es el más importante templo cristiano de la ciudad de Cáceres.
Se completa entre los siglos XV y XVI sobre una construcción del siglo XIII de maneras mudéjares y techo de madera.
Realizada completamente con sillares de granito, su estilo se puede considerar románico de transición al gótico.
La Iglesia de Santa María la Mayor, fué elevada al rango de Concatedral por Bula de Su Santidad el Papa Pio XII, fechada el día 9 de abril de 1957, estando situada la Catedral de la Diócesis en Coria.
Es la más importante de las cuatro primitivas parroquias cacereñas.
Este Edificio es Monumento Nacional desde el año 1931.
Tiene dos portadas góticas.
La portada principal, en los pies, en la que destaca el escudo de Orellana y los canecillos románicos de la cornisa
La del Evangelio, frente al Palacio Episcopal, con finas arquivoltas y una imagen moderna de la Virgen en el tímpano.
La iglesia tiene una sola torre, renacentista de tres cuerpos y planta rectangular, coronada por tres flameros donde ahora asientan nidos de cigüeñas; fue realizada entre 1554 y 1559 por Pedro de Ibarra.
En la esquina oeste de esta torre, se halla adosada una estatua de San Pedro de Alcántara ejecutada en 1954 por el escultor extremeño Enrique Pérez Comendador.
El templo, de amplias dimensiones y gruesos muros, continuando con la costumbre defensiva de la ciudad, se distribuye en tres naves con seis tramos cada una, separados por arcos apuntados sobre pilares cruciformes.
Con casi idéntica altura, las bóvedas son de crucería gótica; sus claves y entrecruzamientos lucen todo un catálogo de escudos y símbolos heráldicos de las principales familias de la nobleza cacereña.
En la tribuna a los pies de la nave central se encuentra un órgano de 1703 fabricado por Manuel de la Viña (Manuel de la Viña me fezit, anno de 1703), que fue reformado en 1973 por la empresa Orgamusik. Este instrumento en la actualidad cuenta con 27 registros sonantes en dos teclados y pedal.
En el interior merecen especial atención la puerta de la sacristía, realizada por Alonso de Torralba en el año1525, ejemplo del plateresco extremeño;
la Pila de Agua Bendita, realizada en mármol en el siglo XIV;
numerosas lápidas, tumbas y sarcófagos; así como una rica colección de objetos litúrgicos de los siglos XV al XIX.
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